Estar separadas físicamente no significa apagar el deseo. Al contrario: la distancia puede convertirse en un juego erótico que os haga experimentar nuevas formas de intimidad, placer y complicidad.
Sí, echáis de menos los besos, las caricias y las noches de piel con piel… pero mientras tanto, ¿por qué no convertir la espera en algo excitante?
Aquí tienes una guía perfecta para tener sexo a distancia con tu chica (o con quien quieras) y mantener la llama más viva que nunca.
1. Comunicación sexy y sin filtros
Antes de todo: habláis. Deciros lo que os gusta, lo que os enciende y lo que os apetece probar. La sinceridad no solo crea confianza, también puede convertirse en el primer paso del juego erótico.
¿Un ejemplo? Enviaros listas de fantasías pendientes y tachad juntas las que vayáis cumpliendo (aún a distancia).
2. Sexting: el arte de calentar con palabras
Mensajes sugerentes durante el día, fotos picantes cuando no se lo espera, incluso audios susurrados antes de dormir. El sexting es una invitación a encender el deseo poco a poco.
Un mini tip: si vas a tener sexo a distancia con diferentes personas, acuérdate de mandar fotos diferentes (si es lo que quieres, claro). Por si acaso…. si se filtra alguna foto que sepas quién ha podido mandarla. Ojalá no tuviéramos qué pensar en estas cosas, pero también tienes que cuidarte.
3. Juegos de rol y fantasías inventadas
Imaginad que estáis en una fiesta de Fulanita, que sois desconocidas y que os seducís desde cero. Cualquier situación que os pase por la mente y os ponga. La distancia es perfecta para jugar a ser otras y explorar situaciones que quizás no os atreveríais a vivir cara a cara.
4. Videollamadas eróticas
El plato fuerte. Elegid un espacio íntimo, cuidando detalles: lencería, luces bajas, velas o simplemente la naturalidad de estar desnudas. Experimentad con ángulos de cámara, posiciones distintas y, sobre todo, disfrutad de veros y escucharos mientras os dais placer en directo.

5. Juguetes sexuales a distancias
Si todavía no habéis probado los vibradores con control remoto por app, es el momento. Dale el mando a tu chica y deja que ella decida cuándo subir la intensidad. No hay nada más excitante que rendirse al control de la otra, aunque esté a cientos de kilómetros.
6. Erotismo auditivo
El sonido puede ser tan poderoso como la imagen. Graba audios gimiendo, guiándola paso a paso en cómo te tocas o describiéndole con detalle lo que le harías si la tuvieras delante. Un susurro suyo en tu oído puede ser la chispa que necesitas para llegar más lejos.
7. Anticipación como afrodisiaco
Planificad vuestras sesiones hot. Marcad una fecha, calentad motores días antes con mensajes cada vez más intensos y cread un ritual propio. La expectativa es un afrodisíaco en sí misma.
El sexo a distancia no es un sustituto del sexo en persona: es un mundo paralelo con sus propias reglas, retos y placeres. Lo importante es la comunicación, el consentimiento y la creatividad. Y si lo usáis bien, cuando os volváis a ver en carne y hueso, la explosión será todavía mayor.
La pregunta es: ¿estás lista para convertir la distancia en el juego erótico más picante de tu relación?
Celia Naranjo – Psicóloga Socio – Comunitaria y Sexóloga